A menudo hablamos de lazos de sangre, pero nunca debemos olvidar los de la tierra... Michel Ghazal nació en Líbano y llegó a París en 1973 para estudiar un postgrado en gestión empresarial, gracias a una beca del gobierno francés. Con el doctorado en la mano, se trasladó a París y creó su propia empresa de consultoría, especializada en formación en negociación y gestión de conflictos, pero su pensamiento siempre permaneció en su país, al que apoya mediante donaciones periódicas. En 2012, con su carrera a sus espaldas, vendió su empresa y decidió llevar a cabo un proyecto que le apasionaba: "Mi formación ha sido la clave de mi desarrollo profesional y personal. Quería devolver un poco de lo que he recibido...".

A continuación creó el Fundación Ghazal para la Educación, la Investigación y la Paz en el LíbanoLa Fondation de Beirut se centra en tres áreas específicas. En colaboración con los servicios sociales de la Universidad Saint-Joseph de Beirut, la Fundación concede una docena de becas al año (renovables durante toda la carrera) a estudiantes meritorios de origen modesto. Michel Ghazal viaja a Beirut una vez al año para reunirse con los estudiantes, hablar de sus proyectos y de la posibilidad de que continúen sus estudios en Francia. Con el fin de promover el acceso a la cultura para todos, la Fundación Ghazal también organiza una docena de salidas al año, centradas en las artes y la ecología, para los alumnos de la escuela pública de Jezzine, el pueblo donde nació el padre de Michel Ghazal. Visitar un museo o plantar un árbol... cada vez la experiencia es un soplo de aire fresco para estos niños, la mayoría en arresto domiciliario a causa de su extrema pobreza.

Pero Michel no quería detenerse ahí. "He dedicado mi vida a la negociación y la resolución de conflictos. El tema era especialmente sensible en mi país, tras los años de guerra civil (1975-90) que lo destruyeron y dejaron 250.000 muertos". Desde 2012, la Fundación Ghazal apoya cada año a una asociación que trabaja sobre el terreno para promover una convivencia más armoniosa entre los libaneses. Galardonada en 2019, la asociación Chaml fundó una universidad para la no violencia en Beirut. La asociación organiza regularmente obras de teatro en las que actúan juntas distintas comunidades, y trabaja para restablecer los vínculos entre los residentes, algunos de los cuales se vieron obligados en su día a huir de sus pueblos. Desde la explosión del 4 de agosto, Michel Ghazal se ha unido a la Fondation de France para recaudar fondos para el Líbano. Su fundación apoya a los equipos sobre el terreno que se ocupan de las familias más desamparadas y participa en la operación para salvar unos 650 edificios históricos dañados por la explosión. También contribuye al fondo de dotación Francia-Líbano, que ayuda a los estudiantes libaneses en Francia cuyos padres ya no pueden mantenerlos.

Michel Ghazal también hace oír su voz regularmente a través de su blog donde comenta la actualidad y nos recuerda incansablemente el poder de la diplomacia y la negociación. Frente al odio y la violencia que incendian Líbano, y el mundo.